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Orden de San Ignacio de Loyola
Real Mastranza del
Marquesado de Oropesa
"Doña Ana María Lorenza de Loyola Colla"
Real Mastranza del
Marquesado de Oropesa
"Doña Ana María Lorenza de Loyola Colla"
La Orden Militar de Caballería Ligera del Papa San Ignacio de Loyola, es jesuita laica, bajo la Bendición del General de la Compañía de Jesús, Padre Adolfo Nicolás, colaboradores en la obra de Dios y de los Jesuitas en la misión de Cristo, en obras inspiradas en el desarrollo, la justicia social, los derechos humanos de los pueblos , el cuidado del medio ambiente y en la espiritualidad ignaciana, sean o no sus dignatarios de la Compañía de Jesús) click..
Quiénes somos
Los Caballeros de la Orden , soldados de Dios, somos jesuitas laicos, somos hombres y mujeres de frontera, dispuestos a estar en aquellos lugares donde hay situaciones de injusticia, donde otros no pueden o no quieren estar, donde se puede tener un efecto multiplicador en bien de la misión. Hombres preparados para responder a las necesidades de nuestro mundo, solidarizándonos con las víctimas de esta historia y así acompañar a Jesús rumbo a la cruz. Somos Compañeros de Jesús, amigos para la misión, y estamos al servicio de la Mayor Gloria de Dios.
(dijo Lord Maculay)
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Se denomina maltrato ó abuso infantil a cualquier acción u omisión no accidental en la relación hacia un menor, por parte de sus padres ó cuidadores, que le ocasiona daño físico ó psicológico, amenazando severamente ambos aspectos.
Se distinguen cinco tipos básicos de maltrato infantil:
- Maltrato ó abuso físico
- Abandono ó negligencia física y cognitiva
- Abuso sexual
- Maltrato emocional
- Negligencia y explotación
La definición de maltrato implica una valoración social en relación a lo que es peligroso ó inadecuado para el niño. Y aquí reside precisamente la gran dificultad para definirlo, ya que hay una falta de consenso social respecto a lo que constituyen crianzas peligrosas e inaceptables.
A veces resulta difícil establecer una línea de separación entre lo que es un maltrato y que no lo es.
1) En primer lugar la consideración de una acción con maltrato depende en muchos casos de la edad del niño.
2) En segundo lugar la situación psicofisiológica del menor puede condicionar las consecuencias de la acción u omisión ejercidas sobre él, que puede conllevar a una relativización de su consideración como maltrato.
3) Se debe también tener en cuenta que no todos los actos de maltrato necesariamente tienen que dejar secuelas inmediatas y visibles en el menor; esto es especialmente relevante por cuanto las consecuencias importantes de los casos de maltrato infantil no suelen ser las físicas, sino las que afectan al desarrollo del menor en el mediano y largo plazo.
MALTRATO Ó ABUSO FÍSICO
El concepto de maltrato infantil no debe restringirse a la violencia física sino que es mucho más amplio: hay muchas modalidades de maltrato infantil relacionadas con la sobreprotección, que no tienen que ver con la violencia física ó el amedrentamiento psicológico.
La sobreprotección impide que los niños sean estimulados de acuerdo a sus capacidades y les imposibilita atender sus propias necesidades, se sobre-alimenta, sobre-abriga, impiden acciones que favorezcan su independencia: compartir en casas de amigos, ir sin alguno de los padres a festejos de amiguitos, dilatar innecesariamente la infancia. La sobreprotección es semejante a la crianza inadecuada, modalidades previstas en la ley 26.061, donde expresa y claramente se destaca el INTERES SUPERIOR DEL NIÑO.
La ley reconoce el derecho a la libertad personal de los niños, no hace referencias a cuestiones penales, sólo reconoce el derecho que tiene todo niño a ser oído en cualquier procedimiento.
Establece además que los Organismos del Estado deben garantizar programas gratuitos de asistencia y atención integral que promuevan la recuperación de todas las niñas, niños y adolescentes.
El maltrato tiene que ver también con acciones u omisiones que provocan un trastorno del desarrollo, ya sea en lo físico, lo psicológico y/ó lo social.
La carencia nutricia trae aparejado problemas de crecimiento y desarrollo estructural y neuronal. Al final del primer año de vida el cerebro alcanza el 70% del peso cerebral del adulto. Esta proporción se verá seriamente comprometida en la medida que el niño sufra una notoria desnutrición proteico-calórica.
Son síntomas de estas carencias: la apatía, irritabilidad, debilidad muscular, hipertrofia, ansiedad, fatiga crónica, hipotonía, hipo e hiperactividad, entre otras
Los aportes nutricios posteriores pueden recomponer el peso y la talla pero no el retraso del Sistema Nervioso Central, su desarrollo completo sucede antes de los 2 primeros años de vida, no pudiéndose recomponer posterior a esa etapa. Para comprender a un adulto que reacciona violentamente hay que hacer un recorrido por su vida, seguramente estará signada por una serie de episodios con privaciones importantes.
Si observamos que sucede con un niño con carencias emocionales, veremos que inexorablemente influyen en los mecanismos de adaptación durante el proceso de socialización: el niño proviene de un medio inseguro que resulta nocivo para él, tendrá poca capacidad para responder a situaciones nuevas y experimentará serias dificultades en el aprendizaje, trastornos severos de la conducta y en su capacidad empática y solidaria. El niño se va a aislar ó va a tener actitudes violentas:” el esquema que uno conoce,………….es el esquema que uno conoce”, para ellos ésa es la obviedad de la vida; creencia fuertemente arraigada, dada su escasa capacidad para pedir un trato respetable y cariñoso, como tampoco contar con recursos internos de compensación, dada su corta vida. Los padres y/ó cuidadores deben tener claro que si no se lo aborda de manera adecuada se termina fabricando un niño violento, un adolescente violento y finalmente un adulto violento.
El abuso infantil se detecta de diversas formas, especialmente cuando se delegan responsabilidades que no están a su alcance realizar: por ej.: ha habido casos severos donde menores de 10 años tienden a cocinarse ellos mismos porque los padres no han podido traer comida a la casa, incluso han ocurrido situaciones donde el menor permanece más de 24 hs.sin comer.
Existen varios tipos de maltratos infantiles tales como: el abuso sexual, a veces con contacto directo entre el agresor y la víctima; maltrato físico, donde ocurren lesiones desde leves hasta fracturas contra la víctima, no necesariamente hay abuso sexual; maltrato emocional, donde el agresor cosecha el miedo y la angustia sobre la víctima.
MALTRATO EMOCIONAL
En el caso de ser satisfactorio el vínculo entre la madre y el niño, éste va a responder de un modo diferente a los estímulos del medio.
Si la estimulación materna y familiar es apropiada se facilitan los mecanismos adaptativos del niño.
En los casos de maltrato físico, los chicos suelen llegar a los centros de salud con lesiones provocadas por presuntos accidentes, el profesional actuante debe indagar hasta en los más mínimos detalles, la función de los profesionales es diferenciar un accidente de la evidencia de un maltrato; es con esta finalidad que las historias clínicas deben ser meticulosas y registrar absolutamente todo.
LA EXPLOTACION LABORAL O MENDICIDAD
Se habla de estas situaciones cuando estas actividades interfieren de manera clara en las actividades sociales y escolares de los niños, en tanto que son asignadas con el objetivo fundamental de obtener un beneficio económico ó similar para los padres y/ó la estructura familiar.
No responde a una circunstancia específica y justificable, sino que tienen un carácter habitual.
Cuando estas actividades se realizan en el ámbito extradoméstico, en la calle, colocan al niño en situaciones de riesgo de ser abusados, robados ó padecer accidentes.
EL COLMO DE LA INDEFENSIÓN
El maltrato prenatal suele pasar desapercibido. Se ejerce por el consumo de drogas durante el embarazo provocando que el niño nazca con un crecimiento anormal, patrones neurológicos patológicos, ó con síntomas de dependencia física a las drogas. Asimismo una alimentación deficitaria de la madre incide perjudicando todos los sistemas y órganos en formación del bebé, del mismo modo produce serias repercusiones el consumo de tabaco y/ó alcohol, aún en mínimas cantidades.
SINDROME DE MUNCHAUSEN “POR PODER”
Es aquel en que los adultos, comúnmente las madres, acuden a las instituciones de salud en busca de respuestas a una presunta patología que el niño no tiene. Una manera de detectarlo es que fuera de la presencia de la madre no aparecen los síntomas. Asimismo suelen darle medicamentos ó sustancias totalmente innecesarias. El niño es sometido así a múltiples exámenes por patologías inexistentes.
EL DAÑO
El elemento común a todas Las categorías de esta clasificación es el daño y las consecuencias en la salud psicofísica del niño.
La repercusión en la salud mental del niño tendrá íntima relación con:
Intensidad del nivel de estrés y traumas sufridos, la reiteración en el tiempo, el nivel de desarrollo alcanzado al momento del inicio de los malos tratos, y el estado psíquico previo.
La violencia familiar transversaliza la sociedad toda: existe en niveles sociales bajos, medios, altos; la pobreza, la indigencia y el hacinamiento son altamente proclives a la generación de conductas violentas: la constante frustración generadora por habitar en una vivienda y/ó medio tan hostil se traduce en violencia; las persistentes incomodidades, las impotencias que generan tener que tolerar los rigores del clima, situaciones que colocan al ser humano en un mismo umbral biológico respecto de un animal, se encuentran sometidos a la misma desprotección, con la diferencia que el animal viene al mundo provisto de defensas naturales para vivir en tales condiciones: el ser humano: NO, es el único de todos los seres vivos más dependiente y vulnerable en cuanto a condiciones viables de vida.
El pudor también se transgrede de modo inexorable: en una vivienda sin las condiciones mínimas de privacidad para las diferentes funciones de la vida, resulta imposible sostener la intimidad y pudor, que cada acto requiere por su propia naturaleza, siendo generadora esta situación por parte de los adultos abusadores de las mas inconcebibles aberraciones. Se derriban las barreras de la privacidad y del pudor. Estos estados de anomia marcan negativamente, y en la mayoría de los casos, de modo irreversible la sutil mente de las criaturas.
En la indigencia ó estados carenciales severos las leyes se fagocitan, dificultando seriamente la educación sobre los derechos de los niños: el DERECHO A LA INTIMIDAD, el aprendizaje del respeto mutuo; desde esta realidad es que se requieren las mínimas condiciones que una vivienda debe incluir a efectos que la individualidad y pudor de cada integrante de la familia no resulte seriamente amenazada.
Estos daños suelen ser irreparables cuando la magnitud es grave, dada las repetitivas inmovilidades socio-económicas-ambientales, en la mayoría de los casos, en diferentes generaciones.
La vida humana es incompatible cuando las carencias de condiciones esenciales se cronifican, no permitiendo el desarrollo indispensable para un pleno despliegue de las funciones de la inteligencia y el espíritu, básico para posibilitar una adecuada inserción en la comunidad de pertenencia y un desarrollo personal apto a fines de lograr la independencia y la autovalidez, generadoras de una vida digna.
*S.E.
Lady María Lidia Araneo Turdó OCSSPSIL, es Licenciada en Ciencias Sociales
UBA,Licenciada en Ciencias de la Educación UBA , Doctorada en "Innovaciones en
el Tratamiento y la
Investigación de la Violencia y el Maltrato Infantil UBA.
"La Botica de Jackeline"
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los viernes de 1200 Hs a 1300 Hs, hora Argentina por
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